Pues eso, que me cuesta desde hace un tiempo mantener vivo este blog. Son muchas cosas las que me han pasado últimamente. Desde un cambio de empresa que me tiene viajando por toda España y echando más horas que un reloj, pasando por un mes de mayo extraño, lluvioso y que no olvidaré jamás.
Un mes de mayo en el que mi padre falleció, joven, demasiado joven, apenas 65 años, después de una larga enfermedad, que pasó dolorosamente consciente, con mi madre enfermera 24 horas a su lado, hasta que llegó el pasado día 10 en el que ya descansó.
Una marcha – un hasta luego solamente papá – que no por sabida, hasta deseada para que dejara de sufrir, ha dejado por menos de golpearnos, de dejarnos atontados.
La vida sigue, y mi padre lo habría querido así, siempre vitalista, siempre lleno de energía.
Me cuesta contarlo, me cuesta mantener últimamente este blog, pero sigo por aquí, sigo luchando día a día para disfrutar de la vida, porque si nos empeñamos la vida puede ser maravillosa, a pesar de todo.
Cómo te comprendo compañero….. La vida te pone obstáculos en el camino que hemos de sortear. Algunos son una putada, otros menos. Todos jodidos.
Ãnimo y a recuperarse pronto que los que estamos al otro lado de la pantalla te necesitamos.
Un abrazo y sonrÃe….. que la vida es bella…
Mike, frecuento rebuscar en tu página por información para actualizarme en internete. Muy buena tu labor. Aparte, aunque tarde mis condolencias por tu padre. Un saludo.
¡Caray,malditas casualidades!Mi padre también murió hace poco,el 22 de Mayo por una maldita y larga enfermedad cuando iba a cumplir los 64.No solo coincidimos en gustos musicales.En fin, un abrazo,y lo siento.
P.D.:También le dediqué un post, en el que enlacé el «Rock de la cárcel» de Elvis Presley.Era también un tipo simpático y vitalista.Seguro que está de marcha con el tuyo por allà arriba…
Lo siento mucho.
Aunque sea ley de vida y que a veces el destino nos tiene guardado más de lo que creemos y desearÃamos, pero son pruebas… dicen que todo sirve, todo es enseñanza… y qué somos seres frágiles, que duramos lo que duramos, unos más, otros tiene más o menos suerte en esto de las enfermedades, pero que todo es como una loteria ¿no?
Aún disfruto de mi padre (es un decir, porque quizás deberÃa de aprovechar más el tiempo con él) lo veo con su diabetes, con sus cabezonerÃas, con su buen comer que tiene, que le importa un pito cuidarse, aunque ya haya tenido un infarto cerebral y que ahora le ha dado por viajar, que no hay manera de hacerle ver que es un peligro que coga el volante y más llevándose a mi madre …
En fin, que al leerte me han entrado ganas de llamarlo…
Encantada de leerte.